sábado, 16 de enero de 2010

PARONIQUIA o PERIONIXIS

Es un trastorno inflamatorio o infeccioso localizado en los tejidos blandos circundantes a la uña.
Se produce generalmente como consecuencia de una lesión traumática o por una patología previa.Esta anormalidad se presenta preponderantemente en las manos, y con menos frecuencia en los pies, pudiendo ser muy dolorosa y dejar fluir líquido purulento con la compresión.

Factores predisponentes:

Onicofagia ( habito de comerse las uñas)
Traumatismo agudo
Traumatismo crónico o generalizado
Higiene inadecuada
Calzado inadecuado
Manicuría y pedicuría agresivas, colgajo de piel por manipulación de pliegues periungueales cortes de uña inadecuados, usos de quitaesmaltes que afecten la piel, corte o retracción de la cutícula.Irritación crónica por exceso de humedad en tareas domésticas u ocupacionales en contacto habitual con agua, y/o productos químicos, corrosivos, erosivos, u otros sin utilizar protección adecuada. (Lavacopas ,ayudantes de cocina, personas que practican natación, deportistas expuestos a traumatismos, pintores, albañiles, etc.)
El hábito de succionarse los dedos.
Pacientes diabéticos, inmunodeprimidos, o que cursan enfermedades sistémicas o dermatosis, u otras que alteren la continuidad de la piel.
Pacientes con otras patologías preexistentes que afecten a los dedos y/o a las uñas.
El diagnóstico lo realiza el médico, con su tratamiento correspondiente.
El foco infeccioso puede ser visible dentro del pliegue de la uña y/o puede estar debajo de la misma El médico puede indicar un análisis microbiológico, a fin de averiguar que tipo de bacteria u hongo es el causante de la infección.
El facultativo podrá realizar el diagnóstico diferencial ya que existen otras patologías como ser el Síndrome de Reiter ,Psoriasis y en infecciones herpeticas en las que también puede comprometerse la zona proximal del pliegue de la uña, dando un cuadro similar de una paroniquia aguda.
En caso de paroniquia bacteriana el médico puede indicar los antibióticos adecuados, y en casos graves drenará la lesión o realizará tratamiento quirúrgico. En las paroniquias micóticas el médico prescribirá los antimicóticos necesarios e indicará los pasos a seguir.Decidirá asimismo si es necesario extirpar la uña.
La paroniquia aguda es un trastorno tratable teniendo buen pronóstico, la mayoría de los casos resuelve de manera satisfactoria en 7 a 10 días con tratamiento adecuado.En la paroniquia crónica si se puede identificar y corregir el factor predisponente aislado, el pronóstico es favorable aunque el tratamiento médico suele ser más prolongado que la paroniquia aguda, pudiendo llevar varios meses de tratamiento. Lo común es que el problema sea multifactorial y se base en una dermatosis crónica, siendo en estos casos necesario hábitos de protección y una rápida intervención ante signos de recaída. La paroniquia crónica no tratada conduce a un engrosamiento y decoloración con pérdida final de la uña.

Complicaciones:
No son comunes las complicaciones en los casos en los que el paciente concurre al médico precozmente. El problema principal es que se dañe la matriz y quede una cicatriz si no se drena el material purulento tempranamente, esto suele suceder particularmente en los niños.
Otras anormalidades que pueden producirse son surcos y depresiones transversales en la uña(surcos de Beau), pueden llegar a presentarse abscesos, o infecciones más complicadas y afectar incluso a los tendones, a los huesos (osteomielitis), y en ocasiones pueden provocar infecciones en el torrente sanguíneo.
Por lo que se recomienda siempre concurrir al médico.

Se recomienda :

Cortar las uñas en forma recta, no cortar hacia los surcos laterales y procurar que no queden demasiado cortas, ni dejar puntas de riesgo.
Evitar el uso de removedores de cutículas, acetonas, quitaesmaltes, dado que estos son corrosivos y pueden dañar la piel y la cutícula.
Tener en cuenta especialmente no cortar las cutículas, no usar elementos cortantes o punzantes en los surcos ungueales que puedan lesionar la piel.
No raer o comerse las uñas.
Usar guantes de algodón por debajo de los guantes de goma, para mantener las manos secas en las tareas que impliquen contacto permanente con la humedad, uso de detergentes, virulanas, elementos abrasivos, pinturas, etc.
Procurar usar medias de algodón y calzado adecuado según la tarea a desempeñar, a fin de evitar la permanencia de humedad en los pies y la proliferación de hongos y posibles lesiones.
Evitar el contacto excesivo con el frío o calor extremo sin protección en manos o pies.
Para mantener la higiene de las uñas, cepillarlas con un cepillo suave con jabón neutro y abundante agua.
Se recomienda especialmente a los pacientes diabéticos, inmunodeprimidos, en tratamiento oncológico, con escasa movilidad, con patologías dermatológicas, gerontes, etc. y a todas las personas en general visitar periódicamente al podólogo para realizar el correcto cuidado de los pies, fundamentalmente a fin de evitar lesiones, atender las patologías, mantenerlos siempre sanos, y en caso necesario realizar la derivación correspondiente.

Podologa Marcela A.Bermionsolo